lunes, 10 de agosto de 2009

CASTILLOS DE ARENA

Cuando era una niña, me encantaba construir castillos en la arena. Me gustaba sobre todo, adornarlos... Con arena mojada entre mis manos, iba dejando que cayese lentamente, formando torres de rizos, de pequeños pegotes que al secarse, me recordaban la silueta de un bosque encantado, de un laberinto de tierra...
Por eso cuando ví una construcción de Gaudí por primera vez me enamoré. Porque me recordaba a los castillos de arena de mi infancia. Pero esa es otra historia... El caso es que podía pasarme horas y horas haciendo mis castillos, túneles, pozos y por supuesto muchas torres de churretones de arena.
Recuerdo un día en que había construído uno precioso, no me cansaba de mirarlo. De repente, un niño que pasaba, sin más se acercó y le pegó una patada. Y mi castillo se vino abajo. Lloré tanto... no entendía por qué aquél niño lleno de rabia había dado una patada sin motivo a mi castillo y lo había destruído.
Hoy me he vuelto a sentir así. Tal vez sea el riesgo de contruir castillos de arena. Son frágiles, sólo arena húmeda que se acabará secando con el sol. En realidad están condenados a desaparecer, a que se los lleve una ola, a caerse por sí solos...
O simplemente a que alguien que pase a su lado, tal vez sin mirarlos, les de una patada. Pero como ya eres mayor, no lloras. Te quedas mirando con cara de idiota, intentando buscar la letra entre la arena. Creyendo que tal vez puedas reconstruir una vez más el castillo. Pero ya no está. Ya no la sientes. Sólo queda la música.
16 de abril de 2009


LEONARD COHEN/ DANCE ME TO THE END OF LOVE

18 comentarios:

  1. Seguramente no hacemos otra cosa que construir castillos de arena durante toda la vida.

    Felicidades por tu blog al que has conseguido transmitir esa nostalgia recurrente de la niñez.

    Besos.

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  2. Castillos de arena, castillos de naipes, castillos en el aire.
    Ilusiones y sueños que se derrumban. O nos los derrumban.




    S.

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  3. Hola Prometeo...
    Sí, seguro que eso es lo que hacemos,construir castillos de arena.
    Qué bonitos son, verdad?
    Te cuento un secreto? Yo sigo construyéndolos todavía hoy, me pongo con mis palas y mi cubo a la orilla del mar y soy capaz de pasarme horas y horas jugando con la arena.
    Imagino que hay cosas que en el fondo nunca cambian.

    Gracias por pasarte por mi blog y sobre todo por tus palabras.

    Besos para tí también,

    Elena

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  4. Hola Santi.
    Los castillos son bonitos, a mí me fascinan.
    No importa de qué estén hechos.
    Y sí, se derrumban o nos los derrumban. Pero si pensásemos en eso nunca nos decidiríamos a construir nada...
    Gracias por leerme y por dejar tus comentarios.

    Saludos,

    Elena

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  5. Elenitaaaaaaaaaaa.
    ¿Todavia estás trabajando reina?Pírate ya que ya tienes bastantes millones jaja.
    Así que haciendo castillos a tu edad. Es verdad que te vi yo hace poco en la playa pero pensaba que lo estabas haciendo a tu sobrino.
    Por cierto estabas cojonuda con aquel biquini amarillo.Me enciruelé y todo viendote.
    Besos guapisima y coje vacaciones ya

    Fer

    P.d: Tengo una foto que te hice de cuando te rompió el tacon ya te la daré jajaja.

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  6. http://www.youtube.com/watch?v=a0u9znq6P2Q

    Castillos en el aire.
    Evocadora imagen............ una mujer-niña jugando en la arena.Castillos de arena. porque no?

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  7. Fernandín.
    Qué mas quisiera que estar ya folgando, pero no veo modo... si yo te contara.
    Y deja de hurgar en la herida con lo de la edad, aunque luego lo intentes arreglar con lo del biquini, no me comas la oreja.
    Lo de mi sobrino es el viejo truco del almendruco, así no parezco tan mal haciendo castillitos a mis años, sí, qué pacha.
    También lo empleé para ir a ver todas las pelis de Disney, si vas con un niño y pones cara de resignación das el pego aunque a la que te encanten sea a tí, jijiji.
    Besos a tí también, ya me pasarás la foto, sí... aunque no se si quiero verla. Qué situación, jaja.

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  8. (...)


    Por construir castillos en el aire
    a pleno sol, con nubes de algodón
    en un lugar, adonde nunca nadie
    pudo llegar usando la razón.

    Y por abrir ventanas fabulosas,
    llenas de luz, de magia y de color
    y convocar al duende de las cosas
    que tienen mucho que ver con el amor.

    Acaba aquí la historia del idiota
    que por el aire, como el aire libre,
    quiso volar igual que las gaviotas...,
    pero eso es imposible..., ¿o no?...

    Alberto Cortez

    Elena, como siempre felicitaciones. Escribes a veces cosas simples y sencillas pero tan desde a dentro que nos hacen pensar y consiguen tocar en el corazón.

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  9. Afortunadamente aún quedó la música... Que tremenda la impotencia si, después de todo aquel camino andado, tan sólo permaneciera el silencio.

    Hermosa palabras las que encontré en tu blog.

    Besos.

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  10. Hola Carmen.
    Me gusta muchísimo esa canción de Alberto Cortez.
    Yo sigo creyendo que es posible hacer castillos en el aire, tal vez sea una locura y por ello nos tilden de locos pero... que sería de la vida si no nos permitiésemos soñar?
    Muchas gracias por pasarte, por seguirme y por tus comentarios siempre halagadores.

    Un beso,


    Elena

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  11. Hola Onminayas.
    Bienvenido (eres chico, no? lo ví en tu perfil) a mi blog, y gracias por dejar tu comentario y por seguirme. Alguien me habló de la magia de internet. Es que a veces aún se me hace imposible que alguien encuentre mi pequeño blog que anda perdido en este universo virtual y sobre todo que pueda parecerle interesante(prometo que no es falsa modestia)...
    Muchísimas gracias por dejar tu precioso comentario y por seguirme.

    Sí, a veces la impotencia es grande. Se fue la letra, una que escribí con el alma en la boca del estómago y el corazón desbocado...

    Tal vez no era ni el momento ni el lugar para dejar aquellas palabras que alguien pateó como si fuese un castillo en la playa. Pero no importa. Cuando las cosas se hacen de verdad, siempre queda la música aunque la letra desaparezca o la hagamos desaparecer para no verla hundida entre tanto barro.

    Saludos y gracias otra vez...Un beso,


    Elena

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  12. El poeta triste.
    Bonita letra para una mejor música.
    Besos y te tutearé claro..

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  13. ¿¿¿¿¿Elena??????





    S.

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  14. Hola Julio... así está mejor.
    Gracias por pasarte y dejar tu comentario.
    Un saludo,


    Elena

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  15. Santi, estoy aquí, jaja.
    Lo que pasa es que ya estoy (por fín) de vacaciones y no tengo mucho tiempo para actualizar y eso.
    Pero amenazo con volver...

    Saludos,

    Elena

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  16. No hay nada eterno bajo el sol, da igual lo que construyas , las ilusiones que pongas.Nunca sabrás quien o porque va a acabar con él. En un mundo así se vive el presente, si puedes terminarlo ,saca unas bonitas fotos.
    Yo he construido obra muchos metros más grandes y la especulación y la crisis las han dejado vacias o las han derruido millones de euros para que?

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  17. El alma siempre es eterna... Y continuará siendo eterna, por siempre, para quienes creemos en ella. Mire usted si es así, amigo anónimo, que aquel sentimiento me despertó hoy, sólo hoy, de mi letargo. Y este post, al menos para mí, continua tras dos años siendo igual de imperecedero. Si algún día Elena decide cerrar el blog, nada de aquella magia desaparecerá de mi cabeza: se lo puedo asegurar.

    Muchos Besos, Elena.


    Besos, Elena.

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